Texto por: Clarisa Ruiz
Sí, nos interesa reivindicar la escritura como un derecho de todos y por este camino, reivindicar la escritura poética como una posibilidad que no es potestad de unos cuantos talentos o iluminados. Por esta razón en LIEBRE LUNAR ofrecemos tanto talleres de escritura que no necesariamente están dirigidos a escribir narraciones, o a escribir «correctamente», como talleres de escritura creativa, para contar cuentos o hacer novelas. Algunos de nuestros maestros invitados nos sacuden el miedo a escribir… pero encontramos que la materia ideal para cobrar confianza está en partir por narrar nuestras propias vivencias. Este es un camino cómodo para ir soltando la mano. Y esas vivencias propias, empiezan a conformar y a develar nuestra particular visión del mundo. El mundo no está afuera, objetivo, verdadero, real y aparte. Al mundo lo imaginamos y le damos forma, leyéndolo y escribiéndolo, que son actos siempre creativos. Practicar, conocer y disfrutar la escritura es nuestro objetivo.
Mireia Fornaguera ha sido profesora por muchos años y ahora trabaja con un programa del Ministerio de Educación que pone en diálogo a los maestros de maestros en el país. La voz de quienes han estado día a día en ese maravilloso oficio de acompañar las primeras escrituras en la niñez, es un testimonio valioso y raro. Pocos espacios culturales dan eco a las voces de los «profes», porque el dialogo cultura y educación no es fluido en nuestro país. Hay quienes temen «escolarizar la cultura» y hay quienes temen «culturizar la educación». El taller de Mireia se inspira de la metodología de Lucy Calkins, pedagoga norteamericana, profesora de literatura para niños en el Colegio de Profesores de la Universidad de Columbia. Ella co-dirige el Literacy Specialist Program que consiste en un master y un doctorado para profesores. Sus libros son best sellers, entre ellos mencionemos Unidades de estudio en opinión/argumentación, Información y escritura narrativa, El arte de enseñar a escribir y el reciente El arte de conceder con los jóvenes escritores. La metodología construida por más de treinta años es una combinación de goce y rigor en las clases y en la comunidad educativa, profesores, padres, administradores, políticos, que logran tener en el amor por la lectura y la escritura un as bajo la manga. Mireia ha sido también en su vida una combinación de goce y rigor.
